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La UE investiga a Microsoft por la compra de un sistema antipiratería

Indicios de posición dominante tras el acuerdo con TimeWarner

Microsoft y la Comisión Europea están de nuevo enfrentadas, ahora por el intento de la compañía de Bill Gates, junto con TimeWarner, de hacerse con el control de ContentGuard, que ha desarrollado una tecnología para luchar contra la piratería digital. Bruselas decidió ayer investigar a fondo esta operación. La Comisión quiere investigar si ésta podría crear una nueva posición dominante de Microsoft en el mundo.

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La piratería digital se ha convertido en uno de los azotes de la industria: lo que comenzó por los programas informáticos se extendió a la música y ahora ya empieza a hacer mella en el sector cinematográfico. ContentGuard, propiedad de Xerox, el fabricante de fotocopiadoras, desarrolló una tecnología que permite a las empresas de comunicación controlar el volcado de todo tipo de archivos y la recepción de los correspondientes royalties. Es una tecnología nueva, en evolución, para la que no hay un estándar todavía fijado. Ese estándar podría establecerse si las dos compañías líderes mundiales del software y de los contenidos se hacen con la tecnología y la imponen a la competencia.

La adquisición por Microsoft / Time Warner de ContentGuard fue anunciada el pasado mes de abril en Estados Unidos, sin que trascendiera el precio de la transacción. Xerox conservaría una participación simbólica, mientras los adquirientes se repartirían a partes iguales la práctica totalidad de la compañía. Conforme a la legislación de la UE, las dos firmas americanas comunicaron a Bruselas el 12 de julio su acuerdo.

Tras un mes de investigación, la Comisión ha decidido que el asunto tiene calado y trascendencia como para merecer una investigación en profundidad. Bruselas considera que la transacción "podría crear o consolidar una posición dominante de Microsoft en el mercado de soluciones para la gestión digital de los derechos" (DRM, en sus siglas en inglés). La nueva fecha tope para pronunciarse sobre el futuro de la operación es el 6 de enero de 2005. Corresponderá a la futura comisaria de Competencia, la holandesa Neelie Kroes, comunicar la decisión, dado que relevará a Mario Monti el próximo 1 de noviembre, cuando entra en funciones la Comisión que presidirá José Manuel Durão Barroso.

La Comisión hace notar que Microsoft tiene ya una posición de liderazgo en el mercado de soluciones DRM y dice que quiere estudiar si la alianza Microsoft / TimeWarner / ContentGuard crea "incentivos y capacidad para situar en desventaja competitiva a los rivales de Microsoft" en este campo, además de potencialmente "retrasar el desarrollo de normas abiertas de interoperabilidad". El corolario es que "ello posibilitaría que el mercado de soluciones DRM se inclinara hacia el principal proveedor actual, Microsoft".

Y dado que se prevé que las soluciones DRM se generalicen a todo el sector de la tecnología de la información, "la concentración notificada puede tener efectos de propagación en varios mercados relacionados, de la telefonía móvil a los procesadores de textos".

Las prevenciones de Bruselas ante los nuevos objetivos de Microsoft tienen ecos de su recelo por la supremacía del sistema operativo de Windows, un conflicto que se saldó en marzo con la imposición de una multa récord a Microsoft de 497 millones de euros junto a la obligación de compartir secretos de programación y vender Windows sin Media Player, su reproductor de audio y vídeo. Consideró entonces Bruselas que Microsoft abusaba de su posición dominante en el mercado mundial.

Amelia Torres, portavoz de Mario Monti, subrayó ayer que la apertura de una investigación en profundidad no prejuzga la decisión final, si bien las estadísticas muestran que en el 80% de los casos la Comisión plantea objeciones serias. También hay casos, como el reciente pacto entre Sony y Bertelsman, que se cierran sin que se hayan impuesto condiciones.

Neelie Kroes.
Neelie Kroes.

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