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Samsung cierra sus servicios de música y libros

Twitter clausuró en abril su oferta, mientras los servicios en 'streaming' siguen sin dar beneficios

Advertencia al acceder al servicio musical.
Advertencia al acceder al servicio musical.

Samsung cierra su servicio musical. Otro más y no será el último.

El anuncio, efectivo a partir del 1 de julio, llega un mes después de que Twitter cerrara su propio servicio musical que, en su caso, apenas duró un año (en España seis meses). Twitter Music nació con la intención de crear un vínculo más fuerte entre usuarios y estrellas a la vez que se ofrecían tendencias en forma de canciones que comenzaban a ponerse de moda en diferentes lugares del mundo. Algo así como un radar para ser los primeros en estar a la última.

Hace dos años, Google cerró el mismo servicio, pero en China, donde Baidu y otras opciones locales le habían dejado sin ninguna influencia en ese mercado.

Samsung pide a los usuarios de Music Hub que descarguen todo el contenido comprado y que utilicen sus vales de compra antes del 1 de julio, pues después de esas fechas ya no estarán disponibles las listas de canciones, según informa Tech Radar. Según los avisos de la compañía, la tienda musical seguirá abierta.

El servicio permitía a los abonados crear listas de reproducción de hasta 200 canciones, que podían ser almacenadas en el aparato sin necesidad de conexión a Internet. Gracias a MusicHub se podían combinar las listas entre los diferentes dispositivos del hogar del ecosistema del fabricante coreano, del teléfono al televisor. La tarifa dependía del número del número de aparatos conectados, de uno a cuatro. 

El servicio musical se habilitó en gran medida desde la compra, en 2012, del proveedor de servicios de contenidos en la nube, mSpot, y se extendió al ir preinstalado en todos los smartphone Galaxy, con el sistema Samsung Hub.

El cierre llega poco después del de Twitter y mientras se extienden los servicios puramente de streaming (consumo sin descarga), como los de Spotify y Pandora, que son los más populares, aunque su incremento de abonados va paralelo al de las pérdidas económicas. En el caso de Spotify solo una cuarta parte de los abonados paga por la suscripción, mientras que el pago de derechos de autor limita mucho sus márgenes de beneficio. Paradójicamente, la popularidad del consumo de música sin descarga ha frenado las ventas de música digital que, a su vez, también hizo mucho daño a la industria discográfica tradicional.

El cierre del servicio musical no es el único, también ha anunciado a sus clientes que se cierra Books, el servicio de los libros. Una advertencia en los móviles avisa que dentro de poco dejarán de estar disponibles los catálogos de obras, a la vez que promociona la descarga de Kindle.  "Anunciaremos una experiencia aún mejor y sin contratiempos", promete Samsung en sus móviles.

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