Uno de cada cuatro españoles bloquea los anuncios en Internet

Uno de cada cuatro internautas españoles declara estar bloqueando la publicidad en la Red. El móvil es el dispositivo en el que menos influencia tiene los adblockers (bloqueadores de anuncios), por detrás del ordenador y la tableta, pero también es en el que más molesta la publicidad online (75%). Las tendencias apuntan a que en los próximos cinco años se habrá multiplicado por 10 el uso de estos bloqueadores en los móviles. Esos son los resultados que ha arrojado el primer estudio sobre el uso de adblockers en España, realizado por Ia asociación de marketing y comunicación digital IAB Spain, junto a Ligatus y Elogia, presentado este jueves en Madrid.

El móvil se ha convertido en una herramienta imprescindible a la hora de consumir información y de navegar por la Red, al mismo tiempo que una forma de entrada de publicidad. Sin embargo, los usuarios rechazan los anuncios online. "Ahora mismo estamos por debajo de la media europea y americana en utilización de los adblockers para móvil, pero se espera un crecimiento muy fuerte debido al rechazo de esta publicidad en el móvil", explica Paula Ortiz, Directora Jurídica de IAB Spain. De la misma manera que, en menos de dos años, el uso de adblockers ha pasado de ser "residual" a ser "masivo", fundamentalmente gracias al "boca-oreja", señala el estudio. De momento, España supera la media europea de uso de bloqueadores, pero sigue por debajo de EE UU. 

No todos los formatos publicitarios son recibidos de la misma manera. Los que más molestan a los usuarios son: los anuncios pop-up (saltan nada más entrar en el navegador), los pre-roll (vídeos previos al contenido que no se pueden saltar) y los audios y vídeos con autoreproductor. "Todos tienen una característica en común: son intrusivos e impiden ver lo que el usuario está buscando", explica Ramón Montanera, director de marketing de Elogia. 

El estudio explica a los usuarios la contribución de estos anuncios para que el contenido sea gratis: "Hay que concienciar al usuario de la importancia de la publicidad como sustento económico del medio y disfruto de ciertos servicios gratuitos". Aunque los autores reconocen que el fenómeno del adblocking ya no se puede parar proponen maneras de adaptarse a él. "Si se aplican mejoras al mostrar publicidad, como evitar la emergente que tapa contenidos o poder decidir si ceder su información al navegar, siete de cada 10 usuario declara que desactivaría los adblockers", concluye el estudio.