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HTC 10, la gran esperanza

El último 'smartphone' de la firma de Taiwan, que ha reducido sus ventas desde 2015, mejora los aspectos más criticados de su predecesor. Es su última apuesta, junto a las gafas Vive

Los últimos meses no han sido fáciles para HTC. Si en 2015 sus ventas disminuyeron más de una tercera parte, el primer trimestre de 2016 no ha sido mejor, con una caída del 64% con respecto al mismo periodo del año anterior. Inmersa en esta situación, la compañía ha decidido dar el todo por el todo y centrarse en dos grandes bazas: la realidad virtual a través de sus gafas HTC Vive y su último smartphone estrella, HTC 10.

Para el desarrollo de este terminal, que se enfrenta en cuanto a prestaciones y precio con los todopoderosos iPhone 6s o Samsung Galaxy S7, se han tenido en cuenta los comentarios de los clientes sobre los aspectos que no quedaban del todo pulidos en las generaciones anteriores. Así, mientras se mantiene la presencia de un sistema de sonido de gran calidad, se han mejorado notablemente las prestaciones de su cámara. ¿El resultado? Un dispositivo bastante equilibrado y con un funcionamiento estable que supone un paso adelante para la firma taiwanesa.

Por fuera

Ficha técnica

Pantalla: 5,2 pulgadas Super LCD 5, Quad HD (2.560 x 1.440 píxeles, 564 ppp) y cristal curvado Gorilla Glass

Procesador: Qualcomm Snapdragon 820

Memoria RAM: 4 Gb

Almacenamiento: 32 Gb / Ranura para microSD hasta 2 Tb

Cámara: Trasera UltraPixel 2 de 12 megapíxeles (tamaño de pixel de 1.55µm) con apertura de F1.8, flash LED dual y vídeo 4K; frontal de 5 megapíxeles (tamaño de pixel de 1.34µm) y vídeo Full HD

Sonido: HTC BoomSound Hi-Fi Edition, Dolby Audio, Hi-Res Audio, tres micrófonos con cancelación de ruido, auriculares Hi-Res

Batería: 3.000 mAh, Quick Charge 3.0

Sistema operativo: Android 3.0 con HTC Sense

Tamaño: 145,9 x 71,9 x 3,0 – 9,0 mm

Peso: 161 g

Red: 4G

Conectividad: Wi-Fi 802.1 a, b, g, n, ac, Bluetooth 4.2, NFC, DLNA, Miracast, Google Cast, AirPlay, HTC Connect, USB 3.0 type C

Sensores: GPS, ambiente, proximidad, acelerómetro, brújula, giroscopio, magnético, de huellas

Precio: 749 euros

El diseño del HTC 10 recuerda al del HTC A9, aunque se han realizado algunos ajustes que consiguen un conjunto mejor integrado y una imagen más premium. Está fabricado en una sola pieza de metal en la que los bordes biselados y el cristal curvado se encuentran perfectamente fusionados. El tacto es muy agradable y el agarre es bueno, aunque no es el más compacto ni ligero que podemos encontrar hoy día. Sí es bastante resistente, aguantando los golpes y arañazos diarios. Así lo asegura la marca, que lo ha sometido a más de 168 horas de pruebas con temperaturas extremas y a más de 10.000 test de golpes, caídas y corrosión.

En su parte frontal incorpora un botón de inicio con sensor de huellas que funciona rápido aunque el teléfono esté bloqueado y que no ha dado ni un solo error durante las pruebas. Se complementa con dos botones funcionales, uno a cada lado, destinados a la opción de retroceder y a la abrir aplicaciones recientes.

HTC ha optado por eliminar una de las señas de identidad de sus anteriores modelos de gama alta: el doble altavoz frontal Boomsound. Ahora, hay uno situado en la parte superior y el otro se ha trasladado a la parte inferior del dispositivo, junto al puerto USB type C. No es una configuración estéreo y su objetivo es imitar la distribución de los sistemas de audio tradicionales: el primero se encarga de los tonos medios y agudos mientras el segundo se ocupa de los graves. Cada uno de estos altavoces, además, utiliza un amplificador dedicado. El resultado es bastante bueno para tratarse de un dispositivo de este tamaño.

Pero si tuviéramos que elegir una forma para disfrutar del audio sería, sin duda, a través de sus auriculares. Y es que la salida para este complemento también cuenta con un amplificador que ofrece el doble de potencia que uno convencional y mejora la resolución de 16 a 24 bits. Además, el móvil viene de serie con una unidad de mucha mejor calidad que los que acompañan habitualmente a estos terminales. De hecho, están certificados para sonido Hi-Res, resultan particularmente cómodos y tienen unas características técnicas que garantizan una mayor potencia de sonido y una reducción significativa de la distorsión.

Nada más conectarlos por primera vez, aparece un menú que ayuda a configurar el perfil personal de audio: se puede hacer respondiendo a unas preguntas (edad, tiempo de escucha, ruido exterior o tipo de música), aunque el método más preciso es utilizar una prueba similar a una audiometría. En ella, se reproduce una serie de sonidos para detectar el rango de frecuencia que es capaz de captar cada uno de los oídos. De esta manera, se crea un perfil único que se ajusta a la capacidad auditiva individual con resultados realmente positivos. Una vez realizado este proceso, se activa de forma automática cada vez que se conectan los auriculares.

Lo mejor y lo peor

Lo mejor:

- Rendimiento

- Pantalla 2K

- Sonido

Lo peor:

- Resolución de la pantalla

- Gráficos

Mejores fotos con poca luz

La otra característica destacada es su cámara fotográfica, que ha dado un salto de calidad con respecto a los modelos anteriores. Posee una resolución de 12 megapíxeles, como muchos de los smartphones protagonistas de este año. Lo interesante en este caso es que estos píxeles son más grandes de lo habitual (lo que denominan UltraPixels) y, por lo tanto, captan más luz para obtener mejores instantáneas cuando la situación ambiental no es la idónea. Unido a una apertura de diafragma F1.8, la estabilización óptica de la imagen y un sistema de enfoque láser, consigue una captura de imágenes con colores fieles, detalles y exposición adecuada. En líneas generales cumple con las expectativas, aunque hay algunos puntos mejorables. El más importante: la pérdida de nitidez cuando se hace zoom sobre algunas fotografías.

Todos los ajustes de la cámara están situados en un único menú desplegable en la pantalla: cambiar a la cámara frontal, realizar hyperlapse, grabar vídeo 4K, tomar imágenes panorámicas o recurrir al modo Pro, que permite opciones avanzadas para ajustar los distintos parámetros y seleccionar el formato RAW. La cámara frontal, por su parte, ofrece una resolución de cinco megapíxeles y cuenta con características como estabilizador óptico de imagen, modo Pro y disparo HDR automático. Los selfies pueden considerarse adecuados, con buena luz y definición.

Valoración y veredicto

Calidad-precio: ****

Diseño: ****

Innovación:**

Manejo: *****

Extras: **

Veredicto:

Rotundamente bueno

Recomendable

Neutro

Más bien negativo

Muy negativo

Buena resolución

Pasando a la pantalla, estrena un tamaño de 5,2 pulgadas y resolución 2K (2.560 x 1.440 píxeles). La densidad de píxeles es superior a 550 puntos por pulgada, por lo que no es de extrañar que la reproducción de contenido o la lectura de documentos y páginas web sea fantástica. Los colores que es capaz de mostrar son vivos y el brillo es óptimo, consecuencia del empleo de la tecnología Super LCD, que reduce el espacio entre la pantalla y la lámina Gorilla Glass. El único ‘pero’ en la visualización lo encontramos en los ángulos de visión, algo inferiores a otros modelos de alta gama. Por otro lado, su respuesta táctil es rápida y compatible con gestos de Motion Launch que permiten encender o apagar la pantalla al dar dos toques seguidos sobre su superficie o abrir la cámara con el terminal bloqueado al deslizar dos veces el dedo de arriba abajo sobre ella, entre otros.

Igualmente rápido es el uso de aplicaciones debido a la incorporación de un procesador Qualcomm Snapdragon 820 con 4 Gb de RAM. De hecho, y según la propia firma, las apps se inician dos veces más rápido que antes. No se experimenta ningún retraso ni con varias apps abiertas, ni durante la reproducción de contenidos multimedia, ni jugando. Y hablando de velocidad: HTC 10 es compatible con la carga rápida y, además, viene de serie con un cargador Quick Charge 3.0 que permite llenar la batería hasta el 50% de su capacidad en solo media hora; un tiempo que se extiende hasta una hora cuando la carga es completa. En situaciones normales no se necesita recurrir a ella a mitad del día porque alcanza la jornada de autonomía sin problemas.

La competencia

- iPhone 6s

- Samsung Galaxy S7

- Huawei P9

- LG G5

- Sony Xperia X

¿Android Puro?

Este terminal funciona con Android 6.0, aunque posee la capa de personalización característica de HTC: Sense. La sorpresa viene al utilizarla, ya que la taiwanesa ha reducido al máximo sus aportaciones y ofrece un interfaz muy parecido al original, en lo que a notificaciones, ajustes y configuraciones rápidas se refiere. También ha primado las aplicaciones de Google frente a las propias, y son muy pocas las que se han sumado a ellas. Una de las más interesantes es Boost+, que realiza una revisión de las apps instaladas para optimizar el consumo, la rapidez y agregar funciones de seguridad y gestión. La gran diferencia de Sense con la versión pura de Android radica en la manera de colocar las apps e iconos en la pantalla, ya que es posible hacerlo de forma libre, sin tener que ceñirse a la cuadrícula que limitaba su colocación en filas y columnas.

En definitiva, pocas pegas se le pueden poner a un dispositivo de estas características, completo en cuanto a especificaciones y solvente en su funcionamiento. Su mayor reto está en la diferenciación en un mercado cada vez más competitivo. En este caso, la prestación que puede conseguirlo es su magnífico sonido, aunque no es una de las razones habituales de compra de un smartphone. Tampoco invita su precio: 749 euros.

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