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Tesla investiga un accidente mortal en China de un coche con piloto automático

La empresa afirma que no tiene manera de saber si el vehículo tenía conectado el sistema de autoconducción

Imagen inmediatamente anterior al choque del vídeo de la televisión china CCTV.
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Tesla Motors está investigando la causa de un accidente con un muerto en China en el que se vio involucrado uno de sus vehículos con piloto automático. No obstante, la compañía asegura en un comunicado que no tiene manera de saber si el dispositivo estaba conectado en el momento del siniestro. El accidente, ocurrido en enero, se ha conocido dos días después de que la empresa anunciase una actualización de su sistema de piloto automático para mejorar la seguridad de sus coches autopilot, que estará disponible en las próximas dos o tres semanas.

La televisión china CCTV informó este miércoles de que un joven de 23 años, Gao Yaning, murió en enero de este año tras chocar contra la parte trasera de un camión en una carretera del noreste de la provincia de Hebei. La familia de la víctima presentó en julio una demanda contra Tesla y contra el concesionario de Pekín que le había vendido el coche.

"Debido a los daños causados por la colisión, el coche fue físicamente incapaz de transmitir los datos de su sistema de registro a nuestros servidores", asegura la firma en el comunicado. Tesla ha informado de que ha intentado trabajar con la familia Gao para sumar más datos a fin de determinar las causas del siniestro, pero que esto no ha sido posible.

Así quedó el coche tras el siniestro.
Así quedó el coche tras el siniestro.

Los trabajos para la mejora del sistema de autoconducción comenzaron tras el primer accidente mortal de la pasada primavera, en lo que hasta ahora se consideraba el primer accidente con una víctima mortal de un coche con piloto automático. En esa ocasión, el conductor de un Model S chocó contra un camón en Florida mientras iba en el automóvil viendo una película.

El pasado 8 de septiembre, otro conductor falleció en el accidente de un Model S en las proximidades de Ámsterdam. Tesla afirmó entonces que había podido comprobar por los datos de registro que el coche circulaba a 155 kilómetros por hora y que en el momento del siniestro no estaba conectado el piloto automático.

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