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James Armstrong: “La experiencia en la consola supera a la de móvil y tableta”

El consejero delegado de PlayStation España apuesta por la integración con la portátil Vita y un precio inferior a Xbox One para conquistar el mercado

James Amstrong, consejero de Sony Playstation España.
James Amstrong, consejero de Sony Playstation España.Carlos Rosillo

No fue fácil romper el reinado de Sega y Nintendo, pero lo consiguieron. Microsoft todavía no se había planteado hacer una consola y Sony, una marca de electrónica de consumo, decidió dar sus primeros pasos en el mundo del ocio electrónico. James Armstrong, consejero delegado de PlayStation en el Sur de Europa, recuerda que en 1995, el año del estreno, se vendieron 17.000 unidades de la consola. “Hoy no tendríamos ni para abastecer una provincia”, dive. PlayStation 2 fue la popularización de la consola, más de 500.000 unidades en su primer año en España. PS3 lo superó con 600.000. Se niega a desvelar previsiones de venta: “No queremos dar pistas a la competencia”.

El directivo da por hecho que las primeras unidades no serán suficientes para abastecer la demanda. Sabe que es posible que esto decante la compra hacia su competencia, pero lo prefiere a quedarse con stocks. “Habrá oleadas para abastecer a las tiendas semana tras semana de aquí a Reyes”, subrayó.

El estreno de la cuarta generación de consolas de Sony se ha hecho en dos pasos. Hace dos semanas en Estados Unidos, este viernes en Europa. A Japón, su lugar de origen, no le tocará el turno hasta febrero. Se ignora cuándo saldrá en Latinoamérica. De momento las cifras les sonríen: “Vendimos 1,2 millones en las primeras 24 horas solo en EEUU. Xbox One alcanzó un millón sumando este mercado y Europa, que es el doble de población en total”, celebra.

Sin embargo, hay un factor diferencial. PS3 costaba costaba 599 euros en su estreno. PS4, una generación posterior, costará 200 euros menos, 399. Su competencia, Xbox One, 499 euros. “Se tiene la percepción de que Sony hace buenos productos, pero caros. Con PS4 solo será lo primero. La rebaja del precio, sin duda, es una adaptación a la crisis, pero hay que competir”, insiste.

La verdadera revolución llegará a finales de 2014 con la integración de los juegos en la nube con facilidad de descarga, contenido accesible, archivo de partidas y mejor experiencia multijugador

Su meta es que España vuelva a estar entre los cincos países líderes. “En el mejor momento fuimos cuartos en parque de PlayStation, por detrás de Estados Unidos, Japón y Reino Unido. Ahora somos séptimos. Alemania, Francia y Canadá nos han adelantado”, reconoce.

A diferencia de Microsoft, cuya consejera delegada, María Garaña concretó una inversión en promoción de 22 millones de euros, Armstrong se reserva la cifra, pero sí tiene claros los soportes en que invertirá: “En España la televisión es muy importante, es la mejor opción. En segundo lugar, Internet, donde se puede segmentar e ir directos al público que más nos interesa. No solo durante la Navidad, seguiremos durante febrero y marzo”.

Armstrong cree que un buen número de consumidores entre 30 y 40 años se van a reenganchar, aunque reconoce que la llegada de las tabletas y móviles son una competencia inesperada. Su apuesta para paliar esta tendencia pasa por integrar su portátil PS Vita con la nueva hermana mayor. Además de ofrecer un paquete con ambos aparatos, el 90% de los juegos de la consola doméstica se podrán jugar en la pequeña. Según los datos aportados por la empresa, en el último año cuentan con una cuota del 55% del mercado en domésticas. En portátiles se conforman con el 40% sumando Vita y PSP. Nintendo copa el 60% restante.

“La verdadera revolución llegará a finales de 2014 con la integración de los juegos en la nube”, vaticina, “con gran facilidad de descarga, contenido más accesible, archivo de partidas y mejor experiencia multijugador”.

“Hemos cometido errores”, reconoce, “con PS3 fuimos arrogantes. El precio fue uno de los impedimentos; también que salimos 18 meses después de Microsoft. Se pensó en el consumidor, pero no en los desarrolladores, a los que no se lo pusimos fácil. Con PS4 queremos convertirnos en su máquina predilecta para crear nuevas formas de juego”.

Una de las claves para ganarse el favor del público pasa por contar con un buen abanico de juegos. En las últimas semanas se han descolgado algunos títulos del catálogo inicial. “Lamentamos las bajas de última hora”, se excusa, “pero en pocos meses crecerá en calidad y cantidad. Driveclub es uno de los juegos que marcará diferencias”.

Otro factor que puede frenar las ventas es la llegada de grandes producciones para la generación anterior, como es el caso de The Last of Us, Beyond o GT6. Una opción en la que no cree el ejecutivo: “La potencia de PS4 es motivo suficiente para justificar la inversión. He probado, por ejemplo, FIFA 14 en los dos formatos y el salto de calidad es notable”.

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