"La feria da sabiduría sobre el uso de la tecnología"
El director de SIMO destaca la influencia de la feria en la cultura digital
Esta nueva edición de SIMO en Madrid se abre en un contexto de preocupación en el universo ferial internacional del sector. Las cifras de perpetuo aumento en el número de expositores y metros cuadrados se han frenado. También le sucede ligeramente a la feria de Madrid. Su director, Santiago Quiroga, combate el fetiche de los metros cuadrados y defiende el vigor de SIMO.
Pregunta. ¿Que el SIMO no tenga más metros cuadrados que en 2004 es síntoma de algo?
Respuesta. El número de metros cuadrados es ligeramente inferior al del año pasado, pero no es un indicativo de la voluntad o no de asistir a la feria por parte de las empresas, sino de otra manera de estar presente con productos feriales no tan dependientes de los metros cuadrados.
P. ¿La superficie es un fetiche?
R. El tamaño es una referencia, pero no la principal. Lo que debe evaluarse es la influencia del acontecimiento sobre el sector y el interés que tienen las empresas de estar presentes de una forma u otra. En el área de electrónica de consumo hay algunas empresas que no han acudido este año con expositor propio, pero ninguna de estas empresas deja de estar en SIMO. Lo hacen a través de otros
espacios como el dedicado al hogar digital. Es más, SIMO crece. Este año produce nuevas áreas dedicadas a la televisión digital terrestre, a la administración electrónica y con la presencia notable de sectores como el de la distribución, que es una parte básica del negocio —actúa sobre aquello que llegará al consumidor final— pero, almismo tiempo, la menos visible. Otra área que crece es la dedicada a la seguridad informática.
P. Algunas otras ferias españolas se arriman a su homóloga europea para facilitar la agenda de los visitantes. SIMO no. Por otra parte, se debate si sus fechas, a un mes de la Navidad, está demasiado lejos para el consumidor y llega tarde para el fabricante.
R. Es muy difícil para una feria dar con una fecha que sea la más adecuada para todos los subgrupos de componen aquella industria. En el caso de SIMO, no hemos recibido peticiones mayoritarias en favor de otra fecha. Estamos a una suficiente distancia de la feria alemana, el Cebit, y la feria milanesa, más próxima, nunca ha tenido especial incidencia en España. SIMO se orienta hacia el mercado interior y el expositor está interesado en la presentación en España de sus productos.
P. SIMO ofrece una notable agenda de debates, congresos...
R. La feria no hace jornadas de relleno. Las empresas y el sector en general entienden que las conferencias y las jornadas tienen sentido si cuentan algo y responden a una necesidad. SIMO contribuye a crear opinión siendo un foro de primera línea sobre el estado del arte. La feria también lo es del conocimiento. No se trata de que el visitante se lleve sólo un producto, también ha de llevarse sabiduría sobre este producto y su uso. No es elegible si debemos usar o no las nuevas tecnologías. Son vitales yun eventocomo SIMO,en el contexto de la cultura digital española, es positivo. SIMO es una oportunidad no sólo para exponer unos productos, sino para contribuir al conocimiento sobre la necesidad de las tecnologías. La brecha digital existe en España, en el ámbito de las pymes, por ejemplo. Pero no podemos resignarnos y, además, no se puede renunciar a la ambición. ¿Por qué el Instituto de Comercio Exterior expone en SIMO ? Porque las empresas han de ser conscientes de que necesitan tecnología para ser competitivas en un mercado global.
Quiroga maneja las cifras sobre el potencial de SIMO: 700 empresas, 250.000 visitantes, 4.000 periodistas acreditados. Además contempla satisfecho una influencia transversal de SIMO sobre otras ferias que se contagian de la necesidad de incorporar el factor tecnológico en su oferta. ¿Por qué no han de estar presentes las nuevas tecnologías en una feria del calzado o de hostelería?
